Misèria i companyia

Ciutat Jardí Vice
(Capítol 8)
 

(Pel marquès del Centre Residencial Ponent)
 
- ¡¡¡Juan, vivimos entre criminales!!!
 

- Què dius, carinyo??
 

- ¿¿¿Juan, sabes por qué detuvieron el sábado en el Aplec a nuestro vecino Jaume??? ¿¿¿Eh??? ¿¿¿Lo sabes??? ¡¡¡Pues porque han encontrado el cadáver de una chica enterrado en su jardín!!! ¡¡¡Hiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii!!! ¡¡¡Un crimen a veinte metros de casa!!! ¡¡¡Una chica enterrada en el jardín!!! ¡¡¡Muerta, bien muerta!!! ¡¡¡Yo no quiero vivir entre criminales!!! ¡¡¡A veinte metros!!! ¡¡¡Vámonos a casa de mi madre, Juan!!! ¡¡¡Hiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii!!!
 

- Au, posa't tranquil-la, Oti. Seu i explica'm tot això del Jaume, del jardí i de la noia morta...
 

- Me lo acaba de contar todo la Mery, que se ha enterado esta mañana a través de su amigo, el político que te dije. Ayer domingo no salió nada en los periódicos porque hasta hoy se ve que no van a decir nada. Lo llevan todo en secreto. El sábado al mediodía los Mossos d'Esquadra acudieron a casa de Jaume porque alguien dejó una nota en el parabrisas de un coche policial aparcado cerca de la comisaría. Según le han contado a Mery, con una letra de niño alguien explicaba que en el número tal de la calle tal de Ciudad Jardín había un cadáver enterrado en eso, en el jardín. Vinieron dos mossos de paisano y efectivamente, se encontraron con el cuerpo de una chica a medio enterrar. Se ve que alguien había estado excavando por allí esa misma noche, no se sabe si para enterrar a la chica, o para desenterrarla. Jaume no estaba en casa, pero por la noche los mossos ya le localizaron en la peña El Vencill del Aplec del Caragol, como te conté. Pues era por esto, que lo detuvieron. Y ayer domingo el juez lo mandó a prisión. ¡¡¡Juan!!! ¡¡¡Que nuestro vecino está ahora al otro lado de la calle!!! ¡¡¡Pero no en su casa, sino en la prisión!!! ¿¿Qué poco cuesta, no, cruzar la calle y cambiar de vida?? ¡¡Y tú que siempre dices, Juan, que muchos de nuestros vecinos merecerían estar en ese otro lado de la calle!! ¡¡Mira, el primero!! ¿¿Y tu no sabias nada, de todo esto?? ¿¿No viste ningún movimiento extraño por el vecindario, tú, que te levantas tan pronto para trabajar el jardín??
 

- Calma, Oti, que jo parlava per parlar. No crec que tots els nostres veïns siguin uns criminals, encara que d'algún no me'n refiaria pas. I no, no en sabia res. Una cosa així cridaria l'atenció. A més, jo no em moc del nostre, de jardí, així que poca cosa veig. I... què en sap més, la Mery, de tot aixó?
 

- La Mery también me ha contado, porque se ve que lo va diciendo su mujer, que Jaume negaba repetidamente haber cometido el crimen. Decía que no sabía nada del cadáver en su jardín, que debía ser una confusión, o que alguien le había 'cargado el muerto', pero que ni conocía a la chica ni había matado nunca a nadie. Parece que la juez no le creyó y ayer al mediodía le mandó a prisión sin fianza. Yo creo que es muy difícil que no te enteres de que tienes un cadáver enterrado en tu jardín, aunque no le hayas enviado tu, al otro barrio. ¿No, Juan? ¿Por qué me miras con esta cara entre asustada i foteta? ¿No te echas a temblar, de saber que ha habido un asesinato junto a nuestra casa?
 

- Bé, carinyo, està a vint metres, i a més, com diu el Jaume, potser no ha estat ell, el criminal...
 

- ¿Y tú te crees que no sabía nada? Jaume siempre ha sido muy dicharachero, entre el vecindario de Ciudad Jardín. Le conoce casi todo el mundo, y todo el mundo sabe de su afición por las chicas rubias del Este, y esta parece que era rusa, aunque Mery todavía no sabía si la habían identificado. Esta tarde ha prometido que me contará más cosas, porque se iba a comer con su amigo el político.
 

- Ja m'ho explicaràs, doncs, ok?
 

- Juan, de verdad no me puedo creer que te importe tan poco lo que ha pasado aquí al lado. Pareces un zombie. ¿De verdad no sabes nada, de todo este fregao?
 

- Que no, dona, que no.... Jo no em poso a la vida dels altres, i menys als seus jardins...

(Continuarà)